Package | Dosis | Precio | Price per Dose | |
---|---|---|---|---|
Dosis: 20mg | ||||
360 pill | 20mg | €276,66 | €0,77 | |
180 pill | 20mg | €154,08 | €0,86 | |
120 pill | 20mg | €113,81 | €0,95 | |
90 pill | 20mg | €94,55 | €1,05 | |
60 pill | 20mg | €70,03 | €1,16 | |
30 pill | 20mg | €43,77 | €1,46 | |
Dosis: 40mg | ||||
360 pill | 40mg | €404,48 | €1,12 | |
180 pill | 40mg | €225,00 | €1,25 | |
120 pill | 40mg | €166,34 | €1,38 | |
90 pill | 40mg | €139,20 | €1,55 | |
60 pill | 40mg | €102,43 | €1,71 | |
30 pill | 40mg | €63,90 | €2,13 | |
Dosis: 80mg | ||||
90 pill | 80mg | €246,01 | €2,73 | |
60 pill | 80mg | €182,10 | €3,04 | |
30 pill | 80mg | €113,81 | €3,79 |

Telmisartan Description
Descripción general del Telmisartán
El Telmisartán es un medicamento que pertenece a la clase de los antagonistas de los receptores de la angiotensina II, utilizados principalmente para tratar la hipertensión arterial. Su función principal es bloquear la acción de la angiotensina II, una sustancia en el cuerpo que provoca la constricción de los vasos sanguíneos, elevando así la presión arterial. Gracias a su mecanismo de acción, el Telmisartán ayuda a relajar los vasos sanguíneos, facilitando el flujo de la sangre y contribuyendo a reducir la presión en las arterias.
Usos y beneficios del Telmisartán
Este medicamento está indicado especialmente para pacientes con hipertensión arterial, ayudando a controlar los niveles de la presión sanguínea y reducir así el riesgo de complicaciones cardiovasculares como infartos o accidentes cerebrovasculares. Además, el Telmisartán también puede ser prescrito para tratar problemas relacionados con la insuficiencia cardíaca o para proteger los riñones en pacientes con diabetes tipo 2 y enfermedad renal. Uno de los puntos destacados de su uso es que, en ocasiones, puede proporcionar efectos adicionales sobre el metabolismo, contribuyendo a la disminución del riesgo de diabetes en ciertos pacientes.
Modo de administración y dosis
La administración del Telmisartán suele ser oral. La dosis recomendada puede variar según la condición clínica del paciente y la respuesta al tratamiento, pero generalmente consiste en una o dos dosis al día. Es importante seguir las indicaciones del médico y no modificar la dosis sin consultar previamente. Para un efecto óptimo, el medicamento debe tomarse aproximadamente a la misma hora cada día, con o sin comida, garantizando mayor adherencia al tratamiento. No debe interrumpirse el uso sin autorización médica, incluso si los síntomas mejoran, ya que puede ser necesario mantener la medicación de forma continua para evitar que la hipertensión vuelva a aumentar.
Posibles efectos secundarios
Como con cualquier medicación, el Telmisartán puede causar efectos adversos en algunas personas. Los efectos más comunes incluyen mareo, fatiga, dolores de cabeza y lesiones leves en el sistema digestivo como náuseas o molestias estomacales. En casos raros, algunos pacientes pueden experimentar alteraciones en los niveles de potasio en sangre, problemas renales o reacciones alérgicas. Es fundamental acudir al médico si se presentan síntomas inusuales o severos, como hinchazón en la cara o dificultad para respirar. La vigilancia médica regular ayuda a detectar cualquier efecto secundario potencial y a ajustar la dosis si es necesario.
Precauciones y contraindicaciones
El Telmisartán no es adecuado para todas las personas. Está contraindicado en pacientes con antecedentes de hipersensibilidad a cualquier componente del medicamento. También debe evitarse en mujeres embarazadas o en período de lactancia, ya que puede afectar al bebé o al embarazo. Se recomienda precaución en pacientes con problemas renales o hepáticos, y siempre se debe informar al médico sobre cualquier medicación en uso para evitar interacciones. Además, debido a su efecto en la presión arterial, se debe tener cuidado al conducir o realizar actividades que requieran atención, especialmente al inicio del tratamiento, cuando aún no se conoce la respuesta del organismo a la medicación.
Consideraciones finales
El Telmisartán es un medicamento efectivo en el control de la hipertensión, ayudando a reducir riesgos cardiovasculares y a proteger los órganos vitales afectados por la elevación de la presión arterial. Sin embargo, su uso requiere supervisión médica constante para garantizar su eficacia y seguridad. La adherencia a las indicaciones, así como la notificación de cualquier efecto adverso, son fundamentales para obtener los mejores resultados con este tratamiento. Como parte del manejo de la hipertensión, suele complementarse con cambios en el estilo de vida, incluyendo una dieta equilibrada, ejercicio regular y la reducción del consumo de sal y alcohol.